Control del dolor no quirúrgico de la columna vertebral
El dolor de cuello y espalda es un problema común que afecta a aproximadamente un 80% de adultos en algún punto de sus vidas.
El dolor de cuello puede descender hacia el brazo o la(s) mano(s). El dolor de espalda puede descender hacia la pierna y, a veces, hacia el pie. Algunos episodios mejoran rápidamente y otros pueden tardar meses o incluso años en mejorar.
Aquí en el Centro de la Columna Vertebral de Salem Health, comprendemos que el control del dolor puede ser desconcertante, frustrante, y total y absolutamente preocupante. Si bien puede ser aterrador atravesar episodios de dolor de la columna vertebral y cerca de ella, es poco frecuente que la causa de los síntomas sea una afección médica.
Nuestro objetivo es descartar las cuestiones preocupantes o, en caso de que existan, ponerlo en contacto para que vea a un neurocirujano con rapidez.
Una vez que se eliminaron las cuestiones preocupantes, trabajaremos para ayudarle a comunicarse con un especialista que pueda ayudarle a controlar los síntomas y a mejorar la calidad de vida. Es posible que los proveedores sean fisioterapeutas, especialistas en intervencionismo en dolor, fisiatras u otros especialistas de la columna vertebral dentro de nuestra comunidad.
Si no existen síntomas preocupantes, le desaconsejamos que se haga radiografías avanzadas en las etapas tempranas del dolor. Si tiene un dolor nuevo que comenzó hace poco, le aconsejamos lo siguiente:
- Realícese una evaluación o examen físico con el proveedor de atención médica habitual.
- Tome medicación y realice un seguimiento de fisioterapia, masajes y quiropraxia, según se lo prescriban.
- Manténgase en actividad, pero escuche el cuerpo.
- Si los síntomas no mejoran o empeoran en 6 semanas, considere realizarse radiografías avanzadas, como una IRM o TAC.
Cuestiones preocupantes
Llame a su proveedor de inmediato si tiene lo siguiente:
- Una nueva sensación de hormigueo y de entumecimiento en la región de la ingle (no puede sentir el área que usa para sentarse);
- debilidad progresiva en un brazo o pierna (dejar caer cosas o tropezarse con sus propios pies);
- pérdida del control vesical o intestinal (retención con frecuencia, incapacidad para ir al baño);
- disfunción sexual.
Empodérese
Existen muchas opciones moderadas para ayudarle a controlar los síntomas y a mejorar su calidad de vida.
Si bien esto se conversará con el proveedor de atención primaria o el especialista, también hacemos énfasis en la importancia de comprender la afección y las cosas que puede hacer para intentar controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
Videos sobre problemas de espalda específicos
Para entender de manera visual un problema de espalda específico, seleccione un tema para mirar un video: